Muchas
sustancias peligrosas se comercializan puras o formando mezclas que tienen
características especiales, las cuales van asociadas a sus propiedades
intrínsecas (densidad, viscosidad, presión de vapor, temperatura de ebullición,
volatilidad, etc.); estas características las hacen potencialmente dañinas para
la salud humana y animal, y en general para los componentes bióticos de los
ecosistemas naturales. También estas sustancias pueden afectar a los materiales
(infraestructuras) o a obras de arte expuestas al aire libre.
Existen
diversos criterios para clasificar las sustancias peligrosas, pero actualmente
se está difundiendo la que plantea el Sistema Globalmente Armonizado para la Clasificación y
Etiquetado de Productos Químicos (SGA), que según la CEPE /ONU, considera tres
grandes grupos, que engloban a los tipos de sustancias químicas conocidas hasta
la fecha.
En el
primer grupo están las sustancias químicas con peligros físicos,
constituido por sustancias explosivas (como el trinitrotolueno), gases a
presión (como el propano), sustancias inflamables (como las gasolinas),
sustancias corrosivas para los materiales (como el ácido clorhídrico) y
sustancias oxidantes o comburentes (como el peróxido de hidrógeno).
En el
segundo grupo están las sustancias químicas con peligros para salud
humana, constituido por las sustancias corrosivas, que producen daño a la
piel o a las mucosas (como la soda cáustica que ocasiona corrosión cutánea);
sustancias tóxicas, que producen daño a la salud e incluso la muerte (como el
cianuro de hidrógeno); sustancias irritantes o sensibilizantes (aquellas que
afectan a unas personas más que a otras), o que no efectan necesariamente a
todos los expuestos por igual (como el ácido acético); sustancias CMR
(Carcinogenic, Mutagenic, Toxic to Reproduction) que incluyen a las sustancias
cancerígenas, mutagénicas o que pueden afectar a la reproducción, en este grupo
también se encuentran las sustancias que pueden producir daños al feto o
teratógenas (como el mercurio metilado); sustancias STOT (Specific Target Organ
Toxicity) son aquellas que afectan a un órgano del cuerpo humano en particular
(como el ácido nítrico).
En el
tercer grupo están las sustancias que dañan al medio ambiente
(o a los componentes bióticos de los ecosistemas), existe especial preocupación
por aquellas que pueden ser disueltas o trasportadas por el agua y afectar al
ambiente acuático, así como aquellas que pueden deteriorar la Capa de Ozono (como los
clorofluorocarbonos en sus diversas estructuras).
Muchas
sustancias químicas peligrosas se utilizan como materias primas o insumos en
procesos industriales, como combustibles (por ejemplo gas natural), en agentes para
el mantenimiento de equipos y maquinarias (por ejemplo, xilenos) o formando
parte de los agentes limpiadores (por ejemplo, los alquilbencensulfonatos).
También se pueden encontrar como parte de los productos químicos usados en el
hogar (por ejemplo, blanqueadores como la lejía o hipoclorito de sodio) o en
los aparatos eléctricos y electrónicos (por ejemplo, metales pesados como el
cadmio y sus compuestos). Actualmente los residuos y desechos industriales
también contienen sustancias peligrosas, los cuales los tornan peligrosos (por
ejemplo, el aceite lubricante usado).
El
manejo seguro de las sustancias químicas y de las sustancias químicas
peligrosas en particular, es uno de los objetivos fundamentales de la IOMC -Inter-Organization
Programme for the Sound Management of Chemical- (Programa Inter institucional
para la Gestión Responsable
de los Productos Químicos), que para el 2020 plantea “Asegurar que los
productos químicos sean elaborados y utilizados de manera que se minimicen los impactos
negativos significativos sobre la salud humana y el medio ambiente”.
Es
por ello que, todos los que somos usuarios de sustancias químicas, debemos
garantizar el manejo seguro (responsable) de dichas sustancias desde la
producción, almacenamiento, transporte, consumo y post consumo, para prevenir
la ocurrencia de accidentes industriales, accidentes laborales, enfermedades
profesionales y contaminación ambiental (y sus consecuencias).
BIBLIOGRAFÍA
Loayza
Jorge, Boletín Informativo sobre productos y residuos químicos N° 63 (julio,
2010), 64 (agosto, 2010), 65 (septiembre, 2010), 66 (octubre, 2010) y 67
(noviembre, 2010). www.unmsm.edu.pe/quimica/
UNECE.
Sistema Globalmente Armonizado para Clasificación y Etiquetado de Productos
Químicos. Traducción oficial al español de la segunda revisión publicada en el
año 2007. Actualizaciones: www.unece.org
MSc. JORGE E. LOAYZA PÉREZ <jeloayzap@yahoo.es>
Dpto.de Procesos. Fac. de Química e I.Q.- U. Nac. Mayor de San Marcos